domingo, 27 de noviembre de 2011

Los dos borrachos con vino, el vino nos pone juguetones. Nos reímos de cosas tontas, hago chistes tontos que vos celebras con risas, me encanta hacerte reír. Es de noche pero todavía hace mucho calor. Me servís una copa más de vino, ya es como la sexta. De repente cabeceo y vos me mirás, sonriendo. Me pasás la mano por la cara y tratás de correr un mechón de pelo que cae sobre mi frente. El disco que pusiste hace un rato es un poco aburrido, pero no me importa. Nos sentamos en el piso, hace demasiado calor para el sofá de cuero.
Me acerco, de a poco, comienzo a besarte en la mejilla. Lo hago muy despacito, como si estuvieses dormido y no quisiera despertarte. Me mirás, tu sonrisa me parece hermosa. Te reís, nervioso. Me encantás, quiero comerte entero. Te agarro la cara, con ambas manos, y empiezo a besarte. Quiero devorarte. Nos tiramos en el piso, a pesar del calor me avalanzo sobre vos.
No hace falta contar la parte donde te recorro por todos lados. Mis manos y mi boca juegan libremente por donde se les place. Entre la borrachera y la calentura te susurro cosas al oído mientras te voy haciendo mío, muy de a poco.
El calor de la noche ya no importa mientras descansamos desnudos en el piso escuchando ese disco que ya no me parece tan aburrido. Te observo mientras descansas. Me encanta verte tan tranquilo. Paso los dedos por tus labios muy suavemente, tratando de no despertarte. Recorro tu nariz y tus cejas. Abrís los ojos y me sonreís. Te levantás a buscar más vino que para ese entonces ya se acabó.
Desearía no irme pero tengo que hacerlo. Lo pasé tan bien. Quiero volver a verte. Un extraño miedo me invade al pensar que no vas a volver a llamar. Pero es normal, me pasa todo el tiempo. Creo que tengo que trabajar un poco más en mi inseguridad.
Cuando me voy, trato de no parecer muy emocionado. No quiero que te des cuenta que me encantaste. No quiero que pienses que soy raro, después de todo es la primera vez que nos vemos.
Cuando llego a casa tengo un mensaje de texto tuyo. "También es mi canción favorita". Pienso y recuerdo que te canté esa canción de The Smiths que tanto me gusta mientras estabas medio dormido.

"Life is never kind, life is never kind
Oh, but I know what will make you smile tonight..."


Me voy a la cama sonriendo, sabiendo que vas a volver a llamar


No hay comentarios: